Neumáticos tirados ilegalmente en Texas
Los neumáticos tirados ilegalmente a vertederos o vías públicas, ocasionan un riesgo importantísimo a la salud pública, y desde luego producen un fuerte impacto negativo en el medio ambiente. En casi todos los países del mundo existen verdaderos cementerios de neumáticos que ocupan espacios que muy bien podrían estar destinados a parques infantiles, zonas recreacionales o simplemente caminerías o sitios de reunión vecinal. Pero sucede que al no haber una solución óptima para los neumáticos tirados ilegalmente, lo que suelen hacer los organismos encargados del saneamiento de las vías públicas es arrojarlos a estos vertederos, o tal vez peor aún, unirlos a la basura corriente y quemarlo todo junto.
Uno de los peligros que representan estos neumáticos tirados ilegalmente, es precisamente el alto grado de combustibilidad que tiene el caucho. Un incendio producido en un cementerio de neumáticos resulta muy difícil de controlar, pero mientras se controla, se liberan al aire una cantidad de gases tóxicos entre los cuales se encuentran el plomo, así como el dióxido y el monóxido de carbono entre otros gases letales, que no sólo dañan la capa de ozono, sino que causan diversos problemas a la salud humana, como por ejemplo daños pulmonares, cáncer y problemas de fertilidad, entre otros.
El otro problema de estos vertederos de neumáticos tirados ilegalmente radica en que durante los periodos de lluvia, estos neumáticos se convierten en el hogar de roedores, mosquitos y bacterias, todos ellos absolutamente perjudiciales para la salud de las comunidades.
Qué hacer con los neumáticos tirados ilegalmente
En varios países del mundo se están llevando a cabo iniciativas orientadas a resolver este problema. Un ejemplo de ello es lo se realizó en Texas en el año 2017, específicamente en los condados de Hidalgo, Cameron y Willacy y otras ciudades de la región, las cuales junto al Consejo de desarrollo de Río Grande, llevaron a cabo un proyecto que ha sido llamado “Camino al Reciclaje”. Mediante esta acción se llegaron a recolectar más de 42.000 neumáticos usados para encauzar su desecho de manera adecuada. El proyecto tuvo un éxito tangible, ya que se lograron liberar de neumáticos vencidos muchos espacios, que seguramente pudieron ser aprovechados de una manera más adecuada por las comunidades, pero además de esto, se logró anotar un punto a favor del resguardo a la salud pública y ambiental.